Quiero conocerte, Señor
Quiero conocerte, Señor y para eso tengo que adentrarme en tu palabra. Se tu historia a groso modo, pero quiero profundizar en ella y reflexionar y que me dé herramientas para mi vida. Sé que te tengo que compartir con mi comunidad y evangelizar. Sé que tengo que dar testimonio, pero me acobarda la gente, con la seguridad que mancillan tu nombre, con la seguridad que mancillan la Iglesia, por unos pocos que actúan mal. El hombre es hombre y peca, sea laico o religioso, esto da lugar a que no respeten la institución de la iglesia. Pero la iglesia somos todos. Señor no sé defenderte, hablar en tu favor, argumentar que no por unos pocos ya hay que despreciar la labor de los ministros del Señor. Quiero saber defenderte y para eso tengo que profundizar en tu palabra, en tu ministerio, en tu vida. Y ser firme en mis argumentos. Señor, en esas ocasiones enmudezco y me da mucha pena que hablen mal de ti, de los religiosos, de la obra que hacen en tu nombre. Hay muchos que pecan, Señor pero otros lo hacen bien. Señor dame entendimiento y voz para dar testimonio de ti y defender su labor y ministerio. Los ministros del Señor son necesarios, su labor imprescindible. Yo misma me siento llamada a la vida religiosa. Señor que no, por unos pocos, que resuenan y escandalizan y dan pie a que su ministerio sea abominable a nuestros ojos, no por esos, se malogre el ministerio de los que lo hacen bien. Conozco religiosos Santos, que hacen una labor encomiable como Angel Moreno en Buenafuente del Sistal, Señor dame herramientas, voz para que pueda defenderlos, defenderte, Señor, sólo puedo hacerlo adentrándome en tu palabra y estando en comunidad, me da ganas de alejarme de esos que te mancillan y mancillan a todos los religiosos por unos pocos, aunque sean mis amigos. Ya no puedo, no puedo escucharles y quedarme impasible, indiferente. Pero no sé cómo hablar, cómo obrar, como defender mi causa. Sí, Señor, tú ya eres mi causa, lo fuiste siempre, pero me acobardo ante su seguridad. No tengo el valor de hablar con esa seguridad y defenderte, defender a los ministros del Señor, y me da vergüenza, que actúen así, esos que escandalizan y lo hacen mal, porque da lugar a que los que lo hacen bien no resuene su labor encomiable, imprescindible y loable. Señor dame el don de la palabra.
Qué bonita reflexión ☺️🙏... así es corazón, por unos pocos malnacidos se mancilla la santidad de los que en silencio cumplen ... éstos últimos no hacen ruido, trabajan duro, oran y rezan, ayudan a las almas afligidas y hacen mucho bien...son Santos en nuestro mundo... pero es más fácil criticar y reparar en el mal que hacen unos pocos que en el bien que hacen muchos ...pues el mal hace más ruido ... Por desgracia en los hospitales hay muchas personas tanto hombres cómo mujeres que ofenden al señor y a la virgen con sus blasfemias yo les " regaño" y les digo : eso no se dice, ya daréis cuenta a Dios 🙏🙏 y en vosotros, personas de bien por qué decís esas horribles palabras...y les digo cosas así, unos hacen caso otros no , pues allá sus conciencias...a veces no es decirles , sino orar por ellos, por nosotros y por todos...no te preocupes, cada uno somos como somos y cómo Dios nos ha creado... tú eres preciosa por dentro y por fuera... adelante, ánimo y fuerzas 😘🥰😘🥰❤️💞💖💐☺️🙏🕯️🍀🎨😍🤗💜💖💝
ResponderEliminarMuchas gracias guapa por comentar en este espacio de reflexión 😉🙃🌈🦆🧚♀️💖🌺🍬🧜♀️🎨🌹🏖🌊🤗🙏💝🚲☘🍃🌱⛲🍂🦋🥰👩🎨🌈😘😘
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